Reseña| El niño en la nieve por Samuel Bjørk

 Ｆｉｃｈａ  ｔéｃｎｉｃａ

Título:  El niño en la nieve

Autor: Samuel Bjørk

Editorial: Megustaleeruy

Sello: DEBOLSILLO

Género: Novela negra y thriller, misterio y suspense

Cantidad de Páginas:  452

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Calificación: 

¡Muchísimas gracias a Me gusta leer Uruguay por el ejemplar!

Invierno de 1999. Un hombre regresa a casa. Está oscuro, hace frío y su coche avanza por una carretera solitaria. De repente, los faros iluminan algo que parece un animal. El hombre pisa el freno con decisión. Frente al vehículo encuentra a un niño en shock, casi congelado. Sobre la cabeza lleva una cornamenta de corzo.

Catorce años después, una mujer es brutalmente asesinada en un lago de montaña. En un plazo de tres semanas, tres personas han muerto. En cada ocasión, el criminal ha dejado una pista invitando a los investigadores Holger Munch y Mia Krüger a un juego mortal. Comienza una carrera contrarreloj contra el más peligroso y aterrador tipo de asesino en serie: el que elige sus víctimas completamente al azar.

 ¡Hola lectores!, ¿Cómo están? 

El renombre de Samuel Bjørk ha crecido significativamente en estos últimos tiempos y yo tenía muchísimas ganas de leer una de sus novelas. Mi primera experiencia con este autor fue más que gratificante, ya que me encontré con un thriller psicológico (propiamente dicho), cuyas 452 páginas devoré frenéticamente, en donde un truculento asesino en serie, que ataca a sus víctimas al azar, invita a los detectives a jugar en una carrera contra el tiempo.

La trama: un tétrico asesino perturba la blanca calma de Noruega

Empiezo por aclarar que El niño en la nieve es, de hecho, la última parte de una trilogía, pero puede leerse de manera independiente (al igual que los otros dos de la serie) porque, aunque hay conexiones entre los tres, cada libro sigue un caso independiente y aunque se hacen menciones a sucesos ocurridos en las otras entregas Bjørk se las arregla para contárnoslo de manera clara, por lo que en ningún momento estamos perdidos o sin saber que está pasando.

Cuando Vivian Berg, una bailarina de ballet, aparece muerta a la mitad del bosque, con su traje de bailarina en una escena del crimen de los más extraña y señales de que ella misma parecía haber caminado hasta su muerte, Mia Kruger y Holger Munch deben volver a unir fuerzas, haciendo resurgir a su unidad policial de élite.

Pese al lúgubre asesinato de Berg, lo que parece imposible en Noruega se confirma luego, cuando una nueva víctima, cuya muerte muestra patrones similares a los de la bailarina, aparece inesperadamente: Kruger y Munch están tras un asesino en serie.

El problema es que las víctimas no tienen nada en común, los mensajes que el asesino deja en las escenas del crimen, aunque planeados de manera artística y precisa, parecen imposibles de conectar y no se sabe a ciencia cierta cuándo será su próximo ataque. El juego de este asesino es despiadado e impredecible, lo que lo hace letal.

Mia Kruger, apoyada por su equipo, comenzará a involucrarse en este caso hasta estar totalmente inmersa en la investigación, ¿qué es lo que le resulta tan familiar en el accionar de este homicida? A la vez que trata de desentrañar la identidad y la motivación de este individuo, Mia deberá compaginar su recuperación mental y física tras la pérdida de su hermana. Atravesando un camino que poco a poco se vuelve más perturbador y peligroso esta detective sabe que, para descubrir quién mato a estas personas, deberá poner en riesgo su propia vida.

Una narración inteligente, puntos de vista astutos

La manera en la que esta novela está escrita es sensacional, Bjørk tiene un estilo filoso, tétrico y punzante, que nos mantiene alerta. Escribe con un dinamismo pausado, la acción y las revelaciones están ahí, son constantes y de buen nivel, pero él se toma su tiempo para desarrollarlas. Me gustó su pluma, detallada y atenta, nunca devela las cosas en su totalidad por lo que siempre queda algo por descubrir, una revelación que cambia todo el paradigma. Samuel Bjørk es muy bueno manejando la anticipación del lector, su ansiedad e intriga. 

Es excelente también creando la atmósfera peculiar de esta novela, blanco cegador, frío hermético y una soledad que parece estar viva. Así, nos adentramos a una Noruega que parece tranquila pero que oculta bajo su superficie algo roto y peligroso. Si a esto le sumamos el factor de un asesino en serie, que actúa de manera impredecible, este entorno se llena de una tensión que va en crescendo, magnifica para la novela. 

Otro aspecto sensacional de la narración son los diferentes puntos de vista que el autor nos otorga, completos y esenciales en aportar su profundidad a la trama. Tenemos la perspectiva de Mia, también la de Holger, que son intimas y nos permiten conocer a nuestros protagonistas, ver su evolución al tiempo que los acompañamos en esta perturbadora investigación. Seguimos también a algunos miembros del equipo de investigadores, que tienen sus propios conflictos y nos guían por otras subtramas, como la red de tráfico de drogas en Noruega. A su vez, algo que me encanto de esta novela es que algunos capítulos son narrados desde las perspectivas de completos desconocidos, personajes secundarios que no tienen mayor aparición que la de ese capítulo en particular. Aun así, Bjørk se las ingenia para hacernos conectar con ellos, vemos un momento de sus vidas, sus rutinas y quienes son, como si de un protagonista se tratase, para rápidamente dejarlos ir. Este nivel de desarrollo en los personajes y en las diversas subtramas, que se entrelazan a la central y le dan un significado diferente, fue fascinante.

Personajes especiales, realistas

Los personajes fueron sensacionales, como dije, llegamos a conocerlos muy a fondo, incluso a los secundarios. Esto le aporta solidez a la historia, la hace muy real y palpable. Mia es una protagonista muy cautivadora, es inteligente y dedicada, apasionada de su trabajo, pero constantemente se enfrenta a sí misma, a sus traumas y miedos. Es un personaje muy humano y sincero que disfrute muchísimo leyendo. Diría que este es otro factor común que tienen los personajes, su humanidad y vulnerabilidad, no son rocas irrompibles, son personas comunes y corrientes que deben enfrentarse a cosas duras, que les dejan maracas.

El final

El nivel de toda la novela fue impresionante, sostenido y atrapante. Durante suficientes paginas se construye la anticipación y estamos leyendo al borde del asiento desando descubrir la identidad del asesino. Pero, para ser honesta, el final se me hizo totalmente precipitado. Sí me sorprendió la identidad del asesino, pero todo lo importante, el descubrirlo, enfrentarlo y demás se desarrolla en pocas escenas, que nos dejan un poco extrañados ante una repentina falta de desarrollo y detalle. Además, algunas psrtes de la trama no se resuelven, quedando extrañamente abiertas.

Para resumir, pese a que el final no fue todo lo que yo esperaba que fuera, considero que este fue el único fallo de una muy buena novela y no puedo dejar de recomendarla. Samuel Bjørk crea una ambientación increíble y tensa, personajes certeramente desarrollados, de gran profundidad, y un asesino truculento que sorprende a cada página. Con una trama bien lograda y giros inesperados, prácticamente no podremos parar de leer. El niño en la nieve fue una lectura impresionante, que disfrute de principio a fin.

No puedo esperar para leer las otras dos novelas de esta trilogía, ¿ustedes conocen a este autor?, ¿leyeron alguno de sus libros?, cuéntenme su opinión en los comentarios.

Samuel Bjørk es el seudónimo del noruego Frode Sander Øien. Es novelista, autor de obras de teatro, cantante, ha expuesto obras de arte y ha traducido a Shakespeare. Escribió dos novelas de notable éxito, Pepsi Love (2001) y Speed for Breakfast (2009), pero el reconocimiento masivo le llegó con Viajo sola (Suma de Letras, 2014), bestseller en todos los países en los que se ha publicado y recibido con excelentes críticas. Vive y trabaja en Oslo.